
"Durante mucho tiempo, mi único objetivo en la vida fue autodestruirme. Hasta que, en una ocasión, sentí deseos de ser feliz. Es terrible, me siento avergonzado, perdonadme: un día experimenté esa vulgar tentación de ser feliz. Lo que he aprendido desde entonces es que aquél era el mejor modo de destruirme. En el fondo, y sin habérmelo propuesto, soy un chico coherente".
me encanta este libro de frederic beigbeder, su estilo para mi es menos pretencioso que el de houllebecq y siempre sabes que esta hablando de si mismo. aunque no estes de acuerdo con muchas de las cosas que dice y sabes que lo hace para provocar, es un soplo de aire fresco para la literatura francesa. un abrazo samu.
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